¿ Cultura de los medios? ¿Medios de la cultura?. No podemos obviar la relación bireccional existente desde los anales de la historia entre los medios y la cultura. Una relación recíproca que se ha intensificado en los últimos tiempos debido a los avances tecnológicos que han dado lugar a nuevas formas de comunicación.
Pero, ¿qué fue antes, el huevo a la gallina? ¿los Nuevos Medios o la Sociedad de los Nuevos Medios?
La sociedad se define desde un marco integrador, como el conjunto de interacciones complejas entre diversos factores:
- Culturales.
- Políticos.
- Económicos
- Sociales.
- Tecnológicos.
Castells en su artículo describe la evolución histórica de los paradigmas tecnológicos y las repercusiones que éstos generan en la sociedad. En el momento actual, nos encontramos inmersos en el informacionalismo. Este paradigma tecnológico surge tras la revolución tecnológica y el proceso de reestructuración socioeconómico y de valores impulsados en EEUU y Europa en los años 60 y 70 en EEUU.
La aplicación de estos cambios al conocimiento, ha generado un mayor acceso, uso flexible y modificación de la información. El informacionalismo ha facilitado, por tanto, que nuestra sociedad se convierta en una sociedad red. En este nuevo tipo de sociedad, los individuos manejan grandes cantidades de información e incluso la modifican utilizando para ello, las Nuevas Tecnologías, pero no promueve, en la mayor parte de los casos, la construción personal del conocimiento sirviéndose de los avances tecnológicos disponibles.
Para alcanzar este nuevo hito, lo que se denomina la sociedad de la información, es necesario dar un paso más y adoptar un compromiso social que debe ser impulsado desde los diferentes campos de conocimiento (educación, tecnología, ética, etc.) partiendo de una serie de premisas comunes que guíen las futuras actuaciones que en muchos casos ya se han iniciado.
La aplicación de estos cambios al conocimiento, ha generado un mayor acceso, uso flexible y modificación de la información. El informacionalismo ha facilitado, por tanto, que nuestra sociedad se convierta en una sociedad red. En este nuevo tipo de sociedad, los individuos manejan grandes cantidades de información e incluso la modifican utilizando para ello, las Nuevas Tecnologías, pero no promueve, en la mayor parte de los casos, la construción personal del conocimiento sirviéndose de los avances tecnológicos disponibles.
Para alcanzar este nuevo hito, lo que se denomina la sociedad de la información, es necesario dar un paso más y adoptar un compromiso social que debe ser impulsado desde los diferentes campos de conocimiento (educación, tecnología, ética, etc.) partiendo de una serie de premisas comunes que guíen las futuras actuaciones que en muchos casos ya se han iniciado.
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